En algún tiempecillo atrás, habitaba en una casa solitaria en el borde de la ciudad, la enmascarada, Nadie sabía por qué, ni como fue que seleccionó ese patético diseño de calavera, pero lo cierto es que era bastante reconocida por aparecer en el balcón de su casa, viendo a los viajantes ir y volver. Un día, años despues de su enmascarada y secreta existencia, la enmascarada decidió desenmascararse, porque quería sentir qué era ser alguien normal, como esos viajantes que veía pasar todos los dias. Un poco de temor alcanzó a sentir, y cuando se la quitó, el viento le dio una fuerte cachetada, y los viajeros que pasaban se quedaron en silencio. Hombres, mujeres, ancianos, ninos. Todos en un incomodo silencio hasta que un gato que maulló los hizo reaccionar. Los viajantes se desconcentraron mientras iban en sus carros y chocaron entre sí. Las mujeres quedaron tan asombradas con su belleza que empezaron a pelearse unas con otras. Y la enmascarada lo veía todo desde su balcón, con una sonrisa en su cara, mientras disfrutaba de ese desastre que es ser
~normal.